¿Qué es la Procrastinación?

En muchas ocasiones hemos escuchado aquel dicho que nuestros abuelos o padres en alguna ocasión habrán mencionado, “no dejes para mañana lo que puedas hacer hoy”, dándonos la pauta que pongamos en acción aquellos asuntos que debemos realizar y no aplazarlos, ¿pero es esto una conducta normal en el ser humano? aplazar los asuntos pendientes, o dejar para mañana lo que podrías hacer hoy, es una costumbre muy humana conocida como procrastinación.
Como se ha dicho, la procrastinación, postergación o posposición, es la acción o hábito de retrasar actividades o situaciones que deben atenderse, sustituyéndolas por otras situaciones más irrelevantes o agradables, procrastinación (del latín procrastinare: pro, adelante, y crastinus, referente al futuro).
Habría que mencionar también que superar el hábito de posponer, propone una serie de características personales que son propias de las personas con tendencia a la postergación, así mismo, algunas de las características psicológicas y de la personalidad podemos mencionar:
Creencias irracionales: basadas en una pobre autoimagen y autoconcepto de sí mismos que les hace verse como inadecuados o incompetentes, o ven al mundo con demasiadas exigencias que no se ven capaces de cumplir.
Perfeccionismo y miedo al fracaso: postergar, y justificar un resultado final por falta de tiempo, sirve de excusa para evitar el miedo al fracaso, en tareas donde no hay garantías de éxito, son personas perfeccionistas y autoexigentes, que se marcan metas poco realistas.
Ansiedad y catastrofismo: el cúmulo del trabajo supone un cúmulo correlativo del nivel de ansiedad. Por lo tanto, la dificultad para tomar decisiones y la búsqueda de garantías de éxito antes de iniciar una tarea provoca finalmente sentimientos catastrofistas, y como resultado se sienten saturados e indefensos. De igual manera, pueden sentir autocompasión, escudándose en que no son aptas para las exigencias del mundo que les ha tocado vivir.
Rabia e impaciencia: las exigencias desmesuradas y el catastrofismo provocan también rabia e impaciencia, considerando que pueden surgir ideas del tipo «yo debería ser capaz de realizar esto solo» «¡qué idiota que soy!» o «¡no puedo tolerar esta ansiedad!». Cabe señalar que estas personas perfeccionistas, al no cumplir con las metas que se marcan, se muestran agresivas contra sí mismos y por lo tanto terminan atrapadas en un círculo de enfado-rebelión que empeora su rendimiento.
Necesidad de sentirse querido: el deseo de realizar tareas sobre la base de la recompensa en forma de amor o aceptación de los demás, así mismo, la creencia que subyace es: «todos deberían amarme para poder amarme a mí mismo». Por lo cual basa su valía como persona en la aceptación y atención recibida. Por consiguiente, si se les recompensa con sus demandas implícitas se sienten fuertes psicológicamente, así mismo, por el contrario, se sienten inválidas cuando no obtienen lo que desean, es así, que por ese motivo estas personas aceptan todo tipo de demandas de los demás con el fin de agradar.
Sentirse saturado: otra característica de esta personalidad es que el trabajo se les acumula, y se ven incapaces de establecer prioridades; lo cual provoca sentimientos de ansiedad, saturación, estrés, angustia, indecisión, impotencia, inmovilización y fracaso, lo que cierra un círculo vicioso del que no pueden escapar.
Me gustaría dejar claro, que hablar de procratinación, es también hablar de los tipos de procrastinación que existen, los cuales son tres:
- Por evasión, cuando se evita empezar una tarea por miedo al fracaso. Es un problema de autoestima.
- Por activación, cuando se posterga una tarea hasta que ya no hay más remedio que realizarla. Es un problema contrario al anterior.
- Por indecisión, típico de las personas que, intentando realizar la tarea, se pierden en pensar la mejor manera de hacerlo sin llegar a tomar una decisión. Se denomina también complejo de Penélope (la mujer de Ulises, que tejía y destejía siempre la misma tela para evitar casarse con los pretendientes al reino insular de Itaca mientras esperaba que volviera Ulises).
Existen bastantes formas y sistemas que nos pueden ayudar a dejar de procrastinar, pero de todas ellas he seleccionado la Regla de 2 minutos, de james Clear.
- Si toma menos de dos minutos, entonces hazlo ahora. Esta parte surge del libro bestseller de David Allen “Getting Things Done”. Es sorprendente cuántas cosas que postergamos podríamos hacerlas en dos minutos o menos. Por ejemplo, lavar los platos después de comer, meter la ropa en la lavadora, sacar la basura, quitar la basura del escritorio, enviar un email, entre otras. Si una tarea requiere de menos de dos minutos, entonces sigue la regla y hazlo ahora mismo.
- Cuando inicies un nuevo hábito, éste debe tomar menos de dos minutos en hacerse. ¿Todas nuestras metas pueden alcanzarse en menos de dos minutos? Claramente no. Pero todas las metas pueden iniciar en dos minutos o menos. Y ése es el propósito detrás de esta regla. Podríamos pensar que esta estrategia es demasiado básica como para lograr nuestras metas de vida, pero no. Funciona para cualquier objetivo por una simple razón: la física de la vida real.
Bibliografía
https://www.muyinteresante.es/salud/articulo/ique-es-la-procrastinacion.
https://es.wikipedia.org/wiki/Procrastinaci%C3%B3n#Bases_psicol%C3%B3gicas_y_de_personalidad.
https://www.significados.com/procrastinacion/
https://definicion.de/procastinacion/